viernes, 17 de junio de 2011

Me declaro incompetente (la última carta)

Existen personas que no quieren ser felices? Este es un extracto de un cuento que estoy escribiendo y que aún no publico. Por eso verán que no es firmado por mí y que quien les escribe no es más que el narrador de esta obra.

“De todo mal que te hice me arrepiento y te pido perdón. Si, Paula… te he hecho daño. He hecho hasta lo imposible por enseñarte las maravillas de la vida, me he ido a los rincones más remotos de los recuerdos de alegría que tengo de ti para recrearlos y que los disfrutes obteniendo a cambio solo el trago amargo del fracaso al cuadrado. Pero hay algo que tengo muy claro: Esta guerra nunca ha sido mía.

De lo único que soy culpable Paula, es de entregarte amor puro y sin miedo pero me declaro totalmente inocente del aguacero torrencial que moja tu corazón todos los días. Por más que te arregles, estas rota desde dentro y haces un esfuerzo admirable por tragártelo y ocultarlo. Admirable. Tu misma cocinaste y preparaste esta lluvia y hoy te quejas del diluvio. Irónico. Duele más saber que tú llegaste hasta aquí por tu propia cuenta y que con el mismo esfuerzo sobre el que construiste esta farsa de ti que los demás aprueban y quieren es la misma hipocresía que hoy juega en tu contra. Te declaraste nula a la autenticidad.

Lo peor de ti Paula, es que has hecho todo este proceso de manera consciente. Sabes que lo que haces es inestable, que te hace mal, que te envenena por completa y que cada día la salida se hace más oscura y aun sigues ahí excavando más profundo buscando saciar una curiosidad malsana que lo único que hace repetir este círculo vicioso una y otra vez…una y otra vez. Me atrevo a decir que tienes una necesidad de estar mal. Toda la vida le has huido a la verdad a tal punto que cuando no quieres encarar el presente lo cambias por uno nuevo sin pensar en los sentimientos y vidas que vas dejando atrás. Eres injusta contigo y con tu pasado.

Y hablando de ti Paula, eres la mujer que más cerca me ha tenido. Yo soy el hombre que más cerca ha estado de ti y ambos nos hemos virado esa cercanía siendo los dos, las personas que más se han alejado uno del otro. Sin embargo, aquí estamos plasmando otro intento fallido de mostrarte felicidad, por generar un abrazo sincero desde tu alma a tu corazón. Buscando la forma de que te reconcilies contigo. Aprendí a la fuerza a dejarte sola, cosa que de paso admito que soy bastante malo en ello. Pero hay algo que tengo muy claro: yo no tengo razones para quedarme tomando consciencia del daño que me haces. No me has dado siquiera una razón para hacerlo (Aunque estoy seguro que no estás en un momento lucido de decidir, debes entender que yo me quiero y se dónde soy bienvenido)

Quiero que sepas que yo llego hasta aquí Paula. Tú puedes ser feliz, mereces ser feliz, pero no quieres ser feliz. Nunca es más oscura la noche que cuando va a amanecer pero ya no estoy seguro de que quieras que amanezca. Me voy, no soporto tu mundo. Recuerda que esta es tu decisión y que esto es lo que has querido. Voy a apagar las luces, a recoger mi amor y me marcho de tu corazón. Sé que la niña quinceañera dentro de ti me despedirá con un abrazo fuerte de esos que tantos te gustan.”

Perdóname mi niña. Un beso,

Sebastián.

3 comentarios: